Por Mo Gawdat
Hay eventos aislados en la vida o en el mundo que nos hacen pensar que vivimos en un mundo de escasez, pero si fuera el caso, ¿cómo explican que en el mismo planeta hay un billón de personas desnutridas y un billón de personas obesas? El problema es de acceso, tanto a la comida como a la información. Lo mismo pasa con la abundancia: ahí está, solo es cuestión de acceder a ella.
En mi libro, El algoritmo de la felicidad, escribí que la vida te da lo que esperas de ella. Si tú esperas que sea difícil, complicada y con muchas carencias, justo así va a ser, pero no por casualidad, sino porque desde tu punto de vista psicológico, de tu foco de atención y hasta físico, empiezas a interactuar con la vida de esa manera, pensando que no tienes nada y que todo es súper difícil.Y eso es lo que atraes.
Mi modelo o algoritmo de la felicidad se llama 6-7-5, porque son 6 grandes ilusiones, 7 puntos ciegos y 5 verdades alternativas que, si las entiendes, te ayudan a ser feliz la mayor parte del tiempo. Lo chistoso es que poco después fui con mi editor a decirle que me gustaría convertirlo en 6-7-6, porque quería incluir la abundancia como la sexta verdad alternativa. Ya era demasiado tarde para cambiar ese libro, entonces quedamos que voy a escribir otro que se va a llamar La sexta verdad. Así de importante y profunda es la abundancia.
Abundancia vs. austeridad
Esta mentalidad es diferente a la de muchas religiones, porque mucho de lo espiritual tiene que ver con el sufrimiento por apego y aversión. El primero es el miedo a perder algo que tienes, mientras que el segundo es evitar que algo te pase. Ese apego es lo que te puede drenar la vida y va mucho más allá de las cosas o personas, puede ser un apego al poder de un puesto o a una posición social. Abundancia es cuando puedes tener todo eso, o no, pero te sientes satisfecho. Si dejas que lo que tienes te controle, entonces no vives en abundancia.
Mentalidad, creencia o estado
En realidad, la abundancia es la forma en la que nuestro universo está diseñado, ¿correcto? Y la única forma de llegar a ella es con un cambio de mentalidad. Volvemos al punto: ahí está, llegar a ella es cosa tuya.Yo me acuerdo muy bien que cuando tenía 23 años no tenía nada y estaba absolutamente feliz. Más adelante obtuve lo que todo el mundo me había dicho que era abundancia: una casa con nueve cuartos, un garaje para 16 coches, una alberca; lo tenía “todo” y, ¿qué creen? Era miserable. Me faltaba abundancia en lo realmente importante y en el amor. Me faltaba estar conectado con el resto del mundo. Hoy en día viajo 250 días al año, vivo en aviones y hoteles con una maleta de 23 kilos (o 22.8, según cuantas barras de proteína traiga, jajaja) y nunca en la vida me había sentido tan pleno.
Desapego o nada
Prácticamente toda enseñanza religiosa nos dice que los sufrimientos más grandes vienen de los apegos y las aversiones. Apego es querer ciertas cosas y aversión, que ciertas cosas no sucedan, evadirlas. Y volvemos al ejemplo de la gente que lo tiene “todo” y se sienten muertos por dentro porque en realidad no tienen “nada” o no son nada sin ellas. Es un vacío total.
Cuando sientes que no puedes vivir sin las cosas, tú les perteneces a ellas. En el islam siempre contamos una historia sobre un niño que va con su maestro a la pequeña piedra en la que siempre se sentaba, a preguntarle cómo encontrar la verdadera felicidad. El maestro le dice: “Sube a la punta de esa montaña y encontrarás a un señor feliz”. El niño llega y se encuentra con un hombre que vive en un enorme palacio de mármol y oro. El niño regresa confundido y le pregunta a su maestro, “¿Me está diciendo que la felicidad es tener un palacio así?”. “¡No! Jajaja. Quería que conocieras a un señor que tiene un palacio así y sabe que si lo pierde, su corazón y su mente se quedarían igual. Eso es abundancia.”
Hay que vivir con soltura, con confianza. El desapego es la única forma de vivir para estar ligeros, ser felices y vivir en abundancia. Cuando no le perteneces a nada, todo te pertenece a ti.
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