El matrimonio es uno de los mayores cambios que puedes hacer en tu vida. A veces a pesar de encontrarnos en una relación seria no conocemos a la persona por completo hasta que sucede algo importante y lamentablemente, eso a veces pasa después del matrimonio
1. Trata mal a los animales: una cosa es que tenga alergias o no le guste tener mascotas, pero tratar mal a seres vivos inocentes, no habla bien de absolutamente nadie
2. Tiene la mente cerrada: una mente abierta es una de las cualidades más importantes para poder convivir sanamente. En una relación se debe ser flexible, saber escuchar y saber decir en la medida justa, pero si la persona con la que convives tiene un pensamiento “cuadrado” será imposible llegar a acuerdos
3. Rompe sus promesas: dicen que nunca hay que prometer nada que no seamos capaces de cumplir. Que alguien rompa una promesa solo nos indica que es poco confiable y si lo hace constantemente, es mejor que salgas corriendo
4. No se preocupa por sí mismo: desde el aspecto físico hasta el mental. Es importante que la persona con la que estás se cuide a sí misma, ¡imagínate! Si no tiene autocompromiso, cómo esperas que cuide la relación…
5. Es desagradecido y no sabe valorar: cada persona en la relación debería estar valorando activamente al otro. Nadie en la relación debería estar siendo el único que valora mientras el otro simplemente está absorbiendo todo. Hay un aspecto de respeto y agradecimiento mutuo que viene con estar en una relación.
6. Miente: no está bien y no hay excusa para hacerlo. Trata de averiguar qué está causando la mentira y cómo pueden trabajar juntos para arreglarla. Pero si no lo reconoce o te echa a ti la culpa, esa persona tiene mayores problemas con los que tú no debes lidiar.
7. No tiene capacidad de llevar una conversación profunda: con el tiempo se forma una conexión, lo suficientemente fuerte como para que las 2 personas puedan pasar tiempo solas estando juntas, se llama coexistencia. Nuestra pareja debe estar ahí para nosotros, así nos sentimos acogedores y amados, ¡y viceversa! Pero cuando cada momento se llena de días superficiales y sin sentido, la relación no puede durar mucho, hay que estar en las buenas y las malas.
8. Es violento/a y no sabe controlar sus emociones: para algunos puede ser obvio, pero definitivamente necesita ser dicho. Si este es el caso, debes apartarte lo antes posible y buscar ayuda. Si tu pareja alguna vez ha sido violenta, sin importar las circunstancias, necesitas hablarlo con alguien de toda tu confianza y nunca quedarte callado/a. Hay personas que se preocupan por ti y te ayudarán, ¡por favor no olvides eso!
9. No siente aprecio por su familia: si no tiene una razón real de por qué odia a su familia, hay un nivel de inmadurez que debe abordarse. Es una gran señal de advertencia cuando a alguien no le gusta su familia por razones que no tiene. Es como la compasión hacia las mascotas, si no amas a las personas a tu alrededor que te han criado y amado toda tu vida, y no te han dado ninguna razón para odiarlos, ¿cuál es el problema?
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