La conexión con nuestros padres es de las más importantes en la vida, ¡son quienes nos trajeron al mundo! Pero eso no quita el hecho de que a medida que uno crece, surja la necesidat de algunos ponerles límites, sobre todo para que acepten tu independencia y tengan una relación más saludable. Checa esta guía para ponerle límites a tus papás sin darle en la torre a su relación.
El tema es ¿cómo se le hace para ponerles un estate quieto sin provocar un pleito o herir sus sentimientos? Ahí te van algunos consejos prácticos para hacerlo con respeto y con responsabilidad afectiva.
Stop! Guía para ponerle límites a tus papás
¿Qué es lo que no te late?
Primero que nada, es bien importante que tengas claras tus necesidades y límites personales. Reflexiona sobre qué es lo que te hace sentir incómodo o presionado y define cuáles son los altos que tienes que fijar. Este paso es fundamental porque te dará la seguridad y confianza en ti mismo y tus decisiones antes de confrontarlos.
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Háblales bien y bonito
A ver, la clave muchas veces no está en el qué, sino en el cómo lo pides, así que procura tener una comunicación abierta y res-pe-tuo-sa. Busca el momento perfecto, en un ambiente relajado para platicar con tus papás sobre tus necesidades. Cero se vale que empieces con acusaciones o reproches, en su lugar cuéntales cómo te hacen sentir esas acciones que quieres que paren, todo de manera clara y asertiva. Luego de eso tienes que darles el derecho de réplica y escuchar sus puntos de vista y preocupaciones.
Ponte en sus zapatos
En la Guía para ponerle límites a tus papás el tema más importante es ser empático. Muchas veces los papás se meten de más porque te quieren proteger, seguro tú harías lo mismo si estuvieras en su lugar. Al comunicar tus límites, considera que pueden tener dificultades para aceptar los cambios, pero explícales cómo te ayudarán a crecer como persona si te sueltan. Asegúrate que tu amor y respeto hacia ellos no cambiará. Cada quien tiene que cometer sus propios errores para aprender.
Ya no hay vuelta atrás
Una vez que ya hiciste todo lo anterior y hayan quedado bien claros los límites, tienes que ser consistente en tus acciones y decisiones eh, no cedas ante la presión o la culpa para volver a caer en los errores del pasado. Si ves que ellos intentan traspasar de nuevo la línea, sé firme y haz un repaso en tus necesidades, con el tiempo lo irán aceptando y verán tu madurez.
Es que son otras generaciones
Es importante aceptar las diferencias generacionales, puede que tus padres tengan valores e ideas diferentes a las tuyas. No los juzgues, ni intentes cambiarlos, solo sé paciente y busca un terreno común donde tanto tú como ellos se sientan cómodos.
Te lo advertimos, no va a ser una tarea fácil, pero si tienes papás autoritarios, esta guía infalible es un paso esencial para crecer como persona y hasta fortalecer la relación familiar. Es normal que al principio haya resistencia al cambio, pero si sigues estos consejos, lograrás encontrar un equilibrio con el tiempo.
¿Te sirvió esta guía para ponerle límites a tus papás?, ¿qué te ha funcionado a ti? Te compartimos algunas notas para sobrevivir a unos padres tóxicos.
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