No se trata nada más de tener una pareja y ya, porque en ocasiones esto nos resta más de lo que nos suma. Es importante construir un vínculo amoroso saludable… ok, pero ¿cómo se hace? Aquí te dejamos 10 características de las relaciones de pareja sanas:
Existe buena comunicación
Sí, es la base, es lo principal. Deben ser capaces de entablar una conversación y de hablar abiertamente de tooodo, lo que les gusta, lo que les incomoda, lo que les hace felices, lo que podría lastimarlos, etc.
Son asertivos y honestos
Ligado al punto anterior, hablar y comunicarse de forma asertiva y honesta es muy importante. De nada sirve tener pláticas interminables si no se comprende el mensaje o se modifica lo que se quiere comunicar por temor a que le moleste a tu pareja.
Respetan sus diferencias y tratan de que éstas siempre sumen
Es obvio que por más similitudes que haya entre ustedes, son personas con diferencias, cada uno tendrá sus propios gustos, manías y aficiones, así que es súper importante que sepan respetar esos puntos en los que no hay similitud y, si se puede, hasta tomarlo como un aprendizaje.
Hay libertad para que cada uno tenga su espacio
Sí, naturalmente tendrán ganas de compartir mucho tiempo juntos, hacer todo juntos e ir a todos lados agarraditos de la mano, peeero ojo con convertirse en muéganos. Por salud mental, busquen tener espacios sin el otro, para ver a sus amigos, a su familia o simplemente para hacer cosas solos.
Su energía está enfocada en el presente y son capaces de soltar el pasado
Esto es muuuy importante, especialmente cuando se trata de los “exes” que se aparecen. A ver, todos tenemos un pasado, una historia y alguno que otro ex, así que es mejor no vivir preguntado por lo que no fue en tu año.
Y si hay alguna discusión, algo te molestó o te hizo sentir mal, háblalo en el momento, nada de sacar un conflicto del 2018 en pleno 2022.
Hay confianza
Sí, también la confianza en una relación es como el agua para las plantas. Imagínate qué horror no estar tranquilo, ni sentirse en paz con la persona que amas. O bien, dudar todo el tiempo de todo lo que dice o hace, y aquí es básico que sepas que si te cuesta confiar en los demás, lo más probable, es que no confíes ni en ti.
Existe un interés y se demuestra
Aquí no se vale el “pues si ya sabes que te quiero y por eso estoy contigo”… ajá sí, pero también demuéstralo. ¿Cómo?, buscando espacios para estar con tu pareja, teniendo detalles bonitos, haciendo cosas que sabes le hacen feliz, escribiéndole un mensaje lindo si sabes que está pasando por un día complicado, sé ese novio/a que te gustaría que fueran para ti.
Hablan sobre las expectativas a futuro, pero siempre con claridad y siendo realistas
Es cierto que siempre pensamos en el futuro rosa, perfecto y divino con quien queremos, peeero en la vida real no es así. Hay que plantear el rumbo que les gustaría que tomará la relación, si les gustaría formalizar en algún momento y qué posibilidades hay de que eso pase, incluso, en relaciones más duraderas es bueno hablar de hijos; si los quieren tener, en cuánto tiempo y esos detalles importantes, pero siempre siendo realistas y sin generar falsas expectativas.
No intentan cambiar a la pareja
Seguro que tu amor tendrá defectos, áreas de oportunidad y cosas que podría hacer diferente, pero así es, así lo elegiste y no se vale querer cambiar a las personas. Sí, podemos aportar, pero jamás con fines de que el otro actúe como quisiéramos nosotros.
Hay disponibilidad emocional
Parece chiste, pero es anécdota… pasa que al principio ves a tu pareja muy entrado, con el interés a tope y súper dispuesto a tener una relación, peeero de un día para otro ¡PUM! parece que te lo cambiaron… ¿qué pasó? Pues en realidad esa persona no tiene disposición emocional, o no la suficiente para tener pareja. Así que antes de empezar a salir con alguien, plantéate a ti mismo si tienes esa intención o si lo único que quieres es salir y conocer gente, pero sin compromiso.
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