Dime con quién te llevas…

Escoger un grupo de trabajo, de amigos o de escuela no es fácil. No se trata de tener amigos solo por conveniencia porque sabes que te van a ayudar a conseguir chamba o porque puedes sacar algo de ellos y si no te sirven los botas y buscas otros. Se trata de ir un poco más allá de la amistad y saber qué rumbo tomar a la hora de elegir a la gente que te rodea pues influye enormemente en tu forma de actuar frente al mundo.

Angela Lee Duckworth investigadora en la Universidad de Pennsylvania, sobre los conceptos intangibles de autocontrol y el éxito académico y profesional, sugiere encontrar diferentes personajes en tu vida que la apoyen constantemente.

El amigo optimista. Todos tenemos momentos difíciles en nuestras vidas, algunos más que otros, pero seguro conoces a un amigo que adora vivir la vida, alguien con eterna buena vibra, que va chiflando por los pasillos, saluda a la gente, y se la vive de buenas. Los estudios indican que rodearte de gente que todo lo ve color de rosa en los momentos complicados hacen que disminuya tu sensación de agobio y veas las cosas con mejor perspectiva.

Tu segunda familia. La familia no se escoge, pero hay amigos que se convierten en tus hermanos. Incluir y apreciar a otros como parte de tu familia hace que te sientas vinculado a más personas de lo que ya estás; funciona muy bien principalmente cuando vives en otra ciudad lejos de tus papás y hermanos, y el sentido de pertenencia y ser parte de un círculo íntimo le da a tu cerebro una sensación de estabilidad.

El retador. Siempre habrá alguien que no le tiene miedo a desafiar tus ideas, a cuestionarte sin pena alguna. La mayoría de nuestros amigos nos dan el avión por no tener conflicto en la relación. Pero aquel amigo que te confronta contigo mismo te ayuda a dar ese paso que a veces es difícil tomar.

El inspirador. Seguro tienes entre tus amigos uno en especial que admiras por lo que ha hecho o por cómo es. Cuando andes perdido puede ser un mentor en tu vida para darte un buen consejo o ayudarte a tomar una decisión difícil.

El oyente. A veces no necesitas de ningún tipo de retroalimentación, consejos ni opiniones de nadie solo alguien que te escuche. Es como ir a psicólogo, casi siempre este tipo de amigo únicamente hace las preguntas indicadas para que tu mismo te respondas y sepas hacia dónde ir.

¿Qué tipo de amigo eres tu? Deja un comentario y escribe a @dulcedagda y @revistamoi.

 

 

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