Un bebé verdugo demanda amor, tiempo, atención; se frustra y hace berrinches constantemente, es envidioso y celoso. Además, no le gustan ni las críticas ni los cambios y espera que le resuelvan todo… Suena horrible, ¿no? Pero es tan, tan, tan adorable que terminas aguantándole todo. Algo así como el Nene Consentido de Dinosaurios. Suavecitos y abrazables, quizá en un maratón de Netflix los ames, pero en la vida real no los aguantarías un día entero.
1. El ex: En Viviendo con mi ex Vince Vaughn hace el personaje de un súper adorable novio que dice amar a Jennifer Aniston pero en realidad no se quiere comprometer para nada y con su encanto de niño logra escaparse.
2. La mamá: si veías Gilmore Girls de chica, seguro querías tener una mamá cool como Lorelai, pero si (como yo) estás volviendo a ver la serie (que regresa este año en Netflix), seguro te parece cada día más molesta. Es súper verdugo con Rory, sus papás, sus novios, pero lo oculta perfectamente detrás de su fachada de mujer fuerte e independiente.
3. La porrista inalcanzable: en 10 cosas que odio de ti, Bianca es la clásica niña popular gringa. Usa a un enamorado para lograr que su papá le dé permiso de salir… pero con otro. Y así manipula también a su hermana y a quien se deje.
4. La niña consentida: Veruca Salt de Willy Wonka es la más mimada de los ganadores de la visita a la fábrica de chocolate. Su papá le compra todo lo que ella pide y si no obtiene lo que quiere grita y llora. Es quizá el ejemplo más literal de un bebé verdugo. Tanto que hizo a su padre mandar a todas sus trabajadoras a buscar el famoso boleto dorado.
5. El nerd: Sheldon Cooper. Es un bebé en el sentido de que no puede hacer nada solo, hay que llevarlo al trabajo y a comprar sábanas, puede llegar a ser súper, súper molesto, pero por alguna extraña razón lo amamos.
How I Met Your Mother se lleva una mención honorífica por estar llena, LLENA, de bebés verdugos. Empecemos con Ted Mosby, para muchos el ser más insoportable de la televisión reciente. Algunas mujeres lo considerarían súper adorable, pero es el más needy del mundo. Exigiendo el amor de Robin como si fuera su obligación quererlo por “ser bueno”. Luego está Barney, que siempre, siempre quiere que salgas con él a la fiesta y sabe perfecto cómo convencerte, aunque al día siguiente tengas que trabajar. Y sigue Lily, ugh, que hacía con Marshall lo que quería pero a todos les parecía la mujer perfecta.
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